viernes, 30 de abril de 2010

Admiral Duncan.



Hace hoy 11 años un tipo llamado David Copeland se levantó de la cama, cogió un bulto que habría guardado en el armario, un paquete con muchos clavos y tornillos, alrededor de 1500, y se dirigió a la calle.

Giró a la izquierda en Dean Street tomamando Old Compton Street y con el sudor serpenteando su espalda se quedó un momento detenido ante el Admiral Duncan, un pub que llevaba abierto más de un siglo, en el 54 de esa misma calle.

En ese instante pareció que todo quedó suspendido, pero su determinación fue inquebrantable.

Sobre las seis y media de la tarde estalló la bomba.

Además de docenas de heridos murieron Andrea Dykes, una chica de 27 embarazada de cuatro meses, su amigo Nik Moore de 31 y John Light de 32, el que iba a ser el padrino.

¿Por qué?

Odio y miedo...

...y quizás una leve anécdota.

Nick y John y muchos de los heridos eran gays. El Admiral Duncan es un bar gay, un bar gay en una zona gay, el Soho.

Y el odio y el miedo de David Copeland eran solidarios, además de contra los gays utilizó sus clavos y tornillos contra los negros y contra los surasiáticos en un supermercado en Brixton y en Hangbury Street (Brick Lane).

No podemos decir que no vuelva a pasar... el odio y el miedo son una plaga demasiado poderosa.

Podemos recordar.

Y mirar en derredor deseando que mañana, ser negro, bengalí o gay, sea de verdad lo que es, tan solo una leve anécdota.

Today, 11 years ago, a guy named David Copeland woke up, took a package that would have kept in his wardrobe, a package with nails and screws, around 1500, and went out.

He turned left onto Dean Street taking Old Compton Street, with his sweat wriggling around his back, He stood a moment stopped at the Admiral Duncan, a pub that was open more than a century, at 54 in the same street.

At that moment it seemed that everything was suspended, but her determination was unbreakable.

About half past six p.m. bomb exploded.

In addition to dozens of wounded were killed Andrea Dykes, 27, four months pregnant with her first child, died along with her friends and hosts for the evening, Nick Moore, 31, and John Light, 32, who was to be the baby's godfather.

Why?

Hatred and fear...

...and perhaps a slight anecdote.

Nick and John and many of the wounded were gay. The Admiral Duncan is a gay bar, gay bar in a gay zone, Soho.

And the hatred and fear of David Copeland were supportive, he used his nails and screws againts blacks and south Asian as well. In a supermarket in Brixton and in Hangbury Street (Brick Lane).

We can not say that that things don´t happen again ... hatred and fear are a pest too much powerful.

We can remember.

And looking around wishing that tomorrow, being black, Bengali or gay, is truly what it is, only a slight anecdote.

miércoles, 28 de abril de 2010

La mejor foto del mundo



Así la llamó él.

Sencillo.

Buena compañia, tres chupitos de vodka y tres guines.

¿Quién puede pedir más?

Un día con el amigo polaco.

2 from calvanki on Vimeo.



We spend a day with a polish mate. It was great.

martes, 27 de abril de 2010

Patata, cerveza jamaicana y películas con sangre.

Cerveza jamaicana es lo que estaba bebiendo.

Película con sangre es lo que algunos quieren hacer conmigo.

Y patata es esto:


I was drinking Jamaican beer.

Bloody movie is what some people want to do to me.

And this is potato:




Pd: primera aparición, y estelar, de Marta en el blog. Maraaavillooooosso. Maraaavillooooosso.

Por cierto: os quiero

lunes, 26 de abril de 2010

Marathon en London.

Hace más de un año, en los albores de nuestro aterrizaje londinense, el amigo Jorge me propuso correr la maratón de Londres. Puso hasta un plan de entrenamiento. Pero no es serio proponer correr una maratón cuando la iniciativa parte en un bar con pintas de por medio, así que evidentemente no la corrimos, ni la del 2009 ni la del 2010.

Lo de correr una maratón es algo que quiero hacer en la vida. Son varias horas en guerra contra ti mismo, contra tu organismo, contra cada una de tus células que te gritan parar. El maratón es la prueba de la voluntad, de su victoria o derrota.

Quién sabe en el 2011.

Hoy me tope con la celebérrima maratón londinense y como podéis comprobar en el video, nunca será tarde para correrla.

maraton from calvanki on Vimeo.



Por cierto ganó un africano, Tsegaye Kebede. Los cinco primeros fueron africanos. Quizás es que en ese continente es donde la voluntad más a prueba está.

(y en chicas una Rusa Liliya Shobukhova)

Y por cierto Jorge... ya que estamos. Feliz cumpleaños.

A year ago, Jorge suggest me to run the London Marathon. Of course we didn´t and we don´t run this year either, but running a Marathon is something I have always wanted to do. To run a marathon is a fight against yourself and I´m always craving to fight against me.

viernes, 16 de abril de 2010

¿Me molaría viajar por Londres en bicicleta?

A veces la gente te pregunta: ¿qué haces? ¿qué es de tu vida? ¿cómo estás mamona? ¿cómo te va abeja bellotera?

Apuntar que "abeja bellotera" era uno de mis motes, todo por cierto derivados de insectos.

Bien, pues a diario pasan muchas cosas y la mayoría aburridas de contar.

A veces hay otras que si merecen la pena (de contar).

Y hay ciertos otros momentos en las que determinadas cosas...



como las bicis...

...te están rondando la cabeza

¿Compro o no compro una bici?

...

Y así llevo un mes, con esa pregunta merodeando la mollera.

(ovbiamente mollera significa en slang alcalareño cabeza, y conociéndome seguramente se escribirá con "y")

Big time of people sometimes ask you about your life: How are you? What are your feelings? What is in your life happening? "How is the way?", bla, bla, bla. The most of the time, your life, use to be boring. Moreover there are times that deserves to be told. And there are other times which some questions are always in your mind, as:

Should I buy a bike?

sábado, 10 de abril de 2010

Rutinas londinenses: consultar la TFL (transport for london)

Hay una cita en la semana que nunca me pierdo. Puntualmente he de atenderla, sin semana que falle, y cuando por algún motivo he fallado, me he maldecido un millón de veces.

Una de las cosas de que puedas fardar de que estás en la ciudad con el metro más antíguo (ergo, el primero) es que como cualquier simpático abuelete necesita de vez en cuando algunos cuidados.

Estos suelen ser los fines de semana. Y los fines de semanana pues los Londinenses nos tenemos que apañar con la mitad de las lineas en servicio.

Es por eso que cada viernes, a eso de medianoche, puntualmente consulto la celebérrima Transpor for London o Tfl para planear mi itinerario.

He de admitir que en algunas ocasiones he pensado que los tipos de naranja, normalmente gordinflones y en la cuarentena, aquellos que veo las meidasnoches del viernes, justo antes de empezar la que será su jornada laboral (nocturna mayormente y en fin de semana) bebiendo cervezas y fumando cigarrillos como descosidos, alguna vez se me ha pasado por la cabeza que estos hijosdeputa ni trabajan ni na, y que se ponen a escuchar Neil Young, sentados en las escaleras mecánicas, mientras ojean un número atrasado del "Hustler" o el "The Sun" (a cuál más pornográfica). Estos malos pensamientos suelen rondarme en fines de semana como éste, en el que me joden mi linea y tengo que gastar casi un 100% del tiempo más en alcanzar mis paraderos.

Pero, a veces, cuando uno de esos sábados acabas de trabajar y te diriges a tomarte una cerveza o ya a tu casa y ves esto.




Dices, joder, pobres los de naranja, todos cagándose en sus muertos mientras están ahí como cabrones currando en fin de semana y mayormente de noche (cosa que por otra parte no quita que escuchen a Neil Young, lean el Hustler o el The Sun)

One of the thing I have to do every friday before getting the bed is check the website of transport of London. That´s why I don´t want to be late going to work. Sometimes I have thought that the tube orange workers don´t work at all, because it´s too much that every weekend a lot of lines are closed. But, when you finish you shift and going to have beers or at home and you see that... think... shit, they work every weekend and the most of the time at night and there are a lot of shit people like me that we are blaming them.

Anyway check every friday the transport of london is one of my londoner´s habit.

viernes, 9 de abril de 2010

Después de un curso de cinco horas donde me emparanoiaron con las bacterias.

Ayer estuve en un curso de esos de seguridad alimentaria que has de pasar en cuanto tienes un trabajo donde entras en contacto con los alimentos. Ya sabéis tipo: si te arrascas el culo, por favor, lávate las manos antes de volver a tocar la comida.

Tanto nos hablaron de bacterias, bacilococos, contaminación ambiente y tal, que ahora mismo tengo miedo de entrar en mi cocina, que no es que esté particularmente sucia ni muchos menos, pero debe inclumplir como 17 normas higiénicas del restaurante dónde trabajo. Y no os riáis porque las vuestras seguro que también.

Ahora lavo, desinfecto y seco con un paño recién sacado de la lavadora cada cuchillo con el que cortar tres rodajas de tomate.

Sin ir más lejos el simple arroz tiene un bicho que no se mata ni al hervirlo, y está ahí, esperando a contaminarte, a provocarte una diarrea, a que vomites y finalmente mueras sólo en la cama y sin un cura a mano para confesar tus pecados, tipo: padre, he pecado, me arrasqué el culo y luego toqué la comida.

Después del curso me di un garbeo por Hammersmith descubriendo que es una zona bastante más chula de lo que cabía imaginar.

Así que en Hammersmith me encontré con que en Inglaterra se gastan una ironía que no tenemos en España (o que al menos yo conozca)



Me topé con lo que sería la S30 londinense. Es la primera autovía que veo en Inglaterra y como comprobaréis ni lo parece, pero lo es.



En Hammersmith me tomé una pinta (bueno, fue media y sidra, que la cerveza tiene muchos bacilococos) en uno de los pub que están en la rivera del Tamesis. Sitio perfecto para ir en veranito.



Hay un puente mu guapo, pero como soy un egocentrista, me enfoqué a mi con la cámara.



Ahí tenéis la rivera, en una apacible tarde.



De vuelta a casa, como no en el metro, donde vimos a un tipo al que no pude grabar haciendo flexiones usando los largueros donde la gente normal se agarra para no caerse al suelo.



I did a food safety course yesterday to improve my work´s skills. Now I´m a little worried about the hygiene conditions in my kitchen. The fisrt thing I did when I got home was spend seven and a half hours to desinfect it. But I walked around Hammersmith before and I could see that this neighborhood is far more interesting than it seemed.

A veces creo que vivo con un psicópata



o no?

He is a psycho, isn´t "it"?

martes, 6 de abril de 2010

Turning point.



Ya todos sabéis que el Café Nero y yo nos traemos una larga y dilatada historia a cuestas.

Pues resulta que justo enfrente de donde trabajo hay un café nero, y cualquiera que me conozca lo más mínimo sabe que soy amante del cafelito plus cigarrito y más antes de comenzar la jornada laboral.

El café nero tiene una de esas cositas que las llaman "loyalty" que es en cuestión una tarjetita donde cada vez que consumes te estampan un sello y para cuando haces nueve, la décima (consumición, aunque en este caso "décimo" ya que yo siempre pido expresso) te lo regalan.

Ahí está la tarjeta con mis primeras nueve consumiciones, así que ahora tengo derecho a un cafelito gratis.

Cosa que no se si voy a llegar a efectuar ya que...



esta tarjetita ha supuesto un turning point en mi vida.

Y no sé si será más adecuado consumnir el café o enmarcar la dichosa tarjetita para conmemorar mi turning point.

Claro, que antes debería hablar un poco de esto de los turning point, right?. Un turning point es un punto de giro, y como todo los giros indica un cambio de dirección, es aquel momento donde el cambio aparece y tomas un nuevo rumbo. No tiene por qué tener una carga positiva o negativa, indica simplemente el momento del devenir reactivado, el antes y el después y como me falta lírica para esbozarlo mejor, creo que más o menos todos nos hacemos una idea.

Normalmente como solemos ser muy peliculeros y grandilocuentes asociamos los turning point a grandes momentos tipo: cuando mi hijo nacio, cuando la conocí, cuando decidí estudiar esta carrera, cuando no acepté ese trabajo, cuando lancé el dardo en la diana en el XXXIII competición anual de Dardos de Piromonte del Almanzor y me dieron una bizcotela de oro como premio.

Yo creo que los turning points son más de alcantarilla, quiero decí, que no son tan vistosos, ni deslumbrantes, y que la mayor de las veces pasan desapercibidos o están relacionados con cosas que nos parecieron insignificantes.

Y tienen otra cosa. Son en diferido.

No sabes que lo fueron hasta que no dejas pasar el tiempo. El turning point siempre es una conjugación pasada.

Así que para ser honestos con este discurso, en realidad no puedo decir a ciencia cierta que la tarjetita del café nero sea un turning point en mi vida. Pero creo que lo será por un dato significativo, es la primera vez en mi existencia que consigo hacer una pijada de éstas. Nunca coleccioné puntos de moviles, o del banco o del supermercado para conseguir otro móvil, una paellera o un microhondas. Este tipo de cosas suponen demasiada tenacidad para un tipo lazy como yo. Pero esta vez me lo propuse, me propuse coger la tarjeta, guardarla, cada café que tomara mostrarla, que me la estampasen, volver a guardarla, que religiosamente esto sucediera en nueve ocasiones y no perderla... y lo conseguí.

Ya puedo decir que soy capaz de estas cosas. Estuve a punto de conseguirlo con diez años, cuando casi consigo rellenar un album con estampitas de coches, me faltaron dos, creo que uno de ellos era el puto Ford Escort, pero no lo conseguí y aquello marcó vida para siempre; ahora quizás haya conseguido equilibrar la balanza con este otro turning point.

¿Cuál será la siguiente hazaña?

No lo sé, pero ya estoy vislumbrando la posibilidad de sacarme la tarjeta amiga del Morrison y quién sabe, con la misma tenacidad que con el café nero, quizás dentro de algunos meses pueda fardar de nueva liquadora, o de un prensador de pienso que es de lo que me debo estar alimentando ultimamente.

I´m talking about the "turning points"... that moments in your life when everything is changed and anything will be as before. I was in a turning point with the loyalty card of Café Nero. Why? Simple. It has been once in my life I got something free doing something like that. Usually the people think the turning point are instants so significant as "the birth of my son", "the day I met her", "When I got that job", etc, etc, etc... but I think the proper turning points are unnoticed, they are like a shadows. I am so happy,jajaja, with my cofee free... my new target is get the "friends card" of Morrison. Maybe I will be able to tell you soon, very soon, about a new microwave I get.

I´m on the way, jajajaja.

Yeah... of course it seems a no sense in english, but to be honest, it´s a no sense in spanish as well.

sábado, 3 de abril de 2010

Cuando la publicidad iluminó los cagaderos.

Estamos en el mundo donde "todo se vende" y para "que todo se venda" hay que intentar "venderlo". He ahí la publicidad y el marketing, o viceversa, que nunca tuve claro del todo como iba el rollo ese que se tienen la publicidad y el marketing, no se si son madre he hija, matrimonio, amantes... o simples desconocidos.

Por favor, no ayudarme a desentrañarlo, quiero alumbrarme por mi mismo algún día.

La cosa está que la publicidad (y o el marketing) han llegado a los cagaderos. Y de una forma a mi entender bastante guapa.

publicidad from calvanki on Vimeo.



Dejo aquí la dirección del pub, entras, vas directo al cagadero y allí lo verás con tus propios ojos. Tanta información es por si alguien lo quiere meter en su sección de "rincones poco conocidos"

I was in a pub and I could find that amazing mirror with advertising. Obviously we are living in the world where everything can be sold and there must be people that have to get diferents ways to sell them. This way is inside the bog.