martes, 15 de febrero de 2011

Mesa 41-Mesa 51.



Dos mesas, una enfrente de la otra. En la 41 una madre con su hija. En la 51 una mujer con su marido.

En la 41 la niña bosteza, se levanta, tira el arroz por el suelo, corre pa arriba y pa abajo, se deja la mitad de los platos, rompe un papel en mil pedazos, se enfada, que le quitamos el wasabi de los nigiri pero luego se pone wasabi en la sopa, que no quiere limón en el agua, sino que quiere lima, es contestona y para colmo juega a las barbies.

En la 51 una mujer que quiere todos los platos pero sin algún ingrediente, este sin eso, aquel sin oba leaf, el otro sin no sé qué, esto no que estará muy picante, eso me da igual que el de la cocina se tenga que tirar tres horas quitando a mano de una mezcla de verduras ya preparada los trocitos minúsculos de cebolla porque no me gusta la cebolla, que quiero una cerveza pero cuando la cerveza está en la mesa que he pensado que mejor un vino y cuando el vino está en la mesa por qué no me pones un vaso de agua y te das otro paseito y cuando te estás dando el paseito pulsa la luz roja (una luz que utilizan los clientes para llamarnos), no sé, querrá darle la murga otro camarero con lo de la cebolla, y llegas y le pones el vasito de agua y apagas la luz con toda la paciencia y mientras te está diciendo que en vez de la sopa con gambas prefiere el pollo teriyaki pero sin sésamo y muy hecho y tú te dispones a dar el séptimo viaje a la cocina para satisfacer los caprichos de la señora, oyes un crack y es la niña en la mesa de enfrente que se acaba de cargar un plato.

La niña es la señora. Viva imagen de ella, treinta años más joven. Esa niña se convertirá en la señora que dará por culo a algún camarero dentro de tres lustros (como de hecho ya hace, lo que pasa que para ser justos, la niña podría incluso pasar por simpática)

Y sabéis en quién me estaba yo cagando, no en la señora, no en la niña, en la madre que estaba mientras leyendo una revista, contestando mensajes en la blackberry y pensando en qué parte de su cuerpo se iba a inyectar de nuevo botox.

Señora Mamá, mire usted la foto y please don´t litter ("no tire basura")

Today I had two tables, 41 and 51. Annoying kid with her mother in 41, annoying madame with her husband in 51. The annoying little girl in 41 will became in annoying madame in 51. I know that be a parent could be so difficult, but at least let´s try it. Came on!!!! If you let your daughter do whatever she wants, she will be a annoying madame in the future who will make your life a hell (if you have the misfortune to be her waiter). Please, Mrs Mother, could you leave your blackberry and your magazine apart and just teach some good manners to your daughter? Why are there a lot of parents today who don´t care about the manners of his children? Do they believe that these things are learned just breathing air?


4 comentarios:

Marta Comesaña dijo...

Pero, ¡un día menos de trabajo!!, ¿eso no es ná? ;)

Jorge dijo...

A la de la mesa 51 le ha caido un mordajo, no?

Anónimo dijo...

No sé si te gustará, pero he mandado esto ( con copia y pega ) a todos los maestros y maestras de mi claustro.

Calvanki dijo...

anónimo que sé quién eres, ya ves, más lectores. Gracias. Pronto nos vemos.